No es bueno que el hombre esté solo.
Conozca y cite correctamente esta frase célebre de la Biblia. Quién la dijo y por qué.
Autor de la frase: Dios es citado aquí como fuente.
Tema: Amor
Libro de la Biblia: Génesis
Según la Biblia, desde muy temprano en la creación, Dios consideró que no era bueno que el hombre viviera en soledad, e hizo a la mujer como su ayuda idónea.
Los había creado Dios varón y hembra, con el mandato de juntos prosperar y multiplicarse.
El versículo bíblico que inicia el importante tema dice así en Génesis 2:18: “Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él”.
El propio Adán reconoció enseguida lo que significaba la mujer en su vida. “Dijo entonces Adán: Esto es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne” (Génesis 2:23).
Adán llamó a su compañera “mujer”, porque en hebreo el vocablo suena parecido a la palabra que significa “hombre”.
Pero ese es el estado ideal del paraíso divino, muy pronto muchos hombres y mujeres prefirieron la separación y aliviar su soledad de otras diferentes maneras.
En el Nuevo Testamento el texto es citado varias veces para señalar que Dios quiere que la pareja se mantenga unida.
A sus discípulos cristianos en particular, el apóstol Pablo les recetó una fórmula para evitar la soledad autodestructiva, que hoy en día socava a tantos:
“Digo, pues, a los solteros y a las viudas, que bueno les fuera quedarse como yo; pero si no tienen don de continencia, cásense, pues mejor es casarse que estarse quemando” (1 Corintios 7:8).
Pablo se refiere aquí a aquellos ministros que no cuentan con el don divino para mantenerse célibes.
Pero para el común de los mortales que Dios creó, se nos recomienda convivir con nuestra ayuda afín, pues “no es bueno que el hombre esté solo”.