Expolit 2008, vista parcial

La feria del libro cristiano de Miami es un punto de referencia para el trabajo de cientos de editores, autores, distribuidores y libreros. Para muchos en la industria editorial cristiana, su acontecer laborar se divide entre el antes y el después de Expolit.

Ahora todos estamos regresando a casa, a la oficina o tomando un merecido respiro, antes de un nuevo comienzo.

Aunque estas ferias comerciales tenga también muchos detractores y aquellos que dicen: “Demasiados gastos; esta es mi última vez”, es casi imposible escapar de su encanto.

Son cinco días de intensa actividad, que los participantes planifican al dedillo para interactuar con el público que tienen en mente. Cada uno de nosotros vive intensamente su propia área de acción, en un hormiguero de entradas, salidas, conciertos, ventas, reuniones de negocio y conferencias.

No puedo por eso sino ofrecerles una vista parcial de las cosas que entre bastidores sucedieron en Expolit 2008, en las que me vi involucrado y que me gustaron… y otras que no tanto.

• Me encantó que Jeanette Windle firmara para mí un ejemplar de su último libro Paz ardiendo. Le prometí leerlo y valorar su traducción. Jeanette escribe en inglés, aunque domina muy bien el castellano, hasta el punto que dice poder escribir en ambos idiomas.

• Fue espantoso el calor que había en el salón de exhibiciones. No deberían suceder estas cosas en un espacio que se cobra tan bien. Gracias a Dios por los buenos samaritanos en la entrada principal que regalaban una pequeñas botellitas de agua fría y cristalina que nos salvó la vida a muchos.

• Leticia Beltran, publicista de Tyndale Español, me entregó un pequeño tesoro de la editorial: El Evangelio de Juan, un adelanto de la Nueva Traducción Viviente (NTV), que estará lista el próximo año. Por cierto, la empresa ChristianEditing, de la que el autor de estas líneas es Editor Asociado, está trabajando en los textos de la página Web exclusiva que tendrá dicha Biblia.

• Disfruté mucho cuando vi a mi hija Keren, de siete años, totalmente embelesada con la historia de Rut, la heroína bíblica, mediante un DVD animado que estrenó las Sociedades Bíblicas Unidas.

• Apenas tuve unos minutos para saludar a Keila Ochoa, la autora mexicana de Palomas, que pasó volando por Expolit. Keila trabaja intensamente en un nuevo libro.

• En una reunión de los organizadores, finalmente quedó conformado el jurado para el “Premio Grupo Nelson de literatura cristiana de ficción”. Pronto se darán a conocer los cinco representantes de la industria editorial cristiana que tendrán la responsabilidad de elegir la obra ganadora.

• Ciertamente fue merecido el reconocimiento que le hicieran a Marie Tamayo, la directora por muchos años de Expolit, durante la Noche de Gala, y su ascenso a vicepresidenta de Unilit, la editorial organizadora. Quizás en las próximas ediciones mejoren esas aburridas y mal conducidas noches. Los asiduos añoramos aquellas dinámicas galas que animaban la propia Marie y el carismático Rvdo. Luis Ángel Díaz-Pabón.

• No sé cómo estuvieron las ventas ni tengo las estadísticas de participación en Expolit 2008, pero suelo sacar mis conclusiones por el tiempo que tomo en conseguir parqueo los sábados y domingos. Este año lograr estacionamiento fue más difícil que de costumbre.

• Fueron todo un éxito las presentaciones que las empresas Publidisa y ChristianEditing hicieron a los editores interesados en las nuevas tecnologías, modalidades de producción y comercio editorial, entre las que se destacan el e-books, la producción a demanda y el sistema ReadOnTime. Publidisa es una empresa reconocida como en la cima del progreso tecnológico de las nuevas tecnologías para el sector editorial. Muchos editores evangélicos se animaron a dar sus primeros pasos en la activación digital de su catálogo.

• Vi y saludé a viejos amigos, algunos que solo veo de Expolit en Expolit, e hice otros nuevos. Espero verlos otra vez en el 2009… si Dios lo permite.